Un reciente estudio de opinión, realizado por el Observatorio de la Cámara Argentina de Productores de Software Vial, arroja datos preocupantes sobre las conductas de los conductores argentinos. El informe muestra que, aunque el 80% de las personas asegura usar la luz de giro antes de doblar, la percepción sobre los demás es muy distinta: en 8 de cada 10 situaciones observadas, los conductores no lo hacen.
En MAÑANAS EN ORSAI hablamos con Facundo Jaime, vocero del observatorio: «Es crucial entender que esta desconexión entre lo que creemos hacer y lo que efectivamente hacemos puede generar graves inconvenientes en el tránsito», advirtió. La falta de señalización adecuada no solo pone en riesgo a quien no la utiliza, sino también a otros conductores y peatones que dependen de esas señales para anticipar maniobras.
Otro de los puntos destacados del estudio es la confusión sobre el uso de las balizas en situaciones de baja visibilidad, como niebla o lluvia. Casi el 50% de los encuestados respondió incorrectamente, afirmando que usan las luces intermitentes en esos casos, cuando en realidad estas solo deben emplearse en situaciones de detención, maniobras riesgosas o zonas peligrosas. «Es importante no dar mensajes ambiguos. Existen otras formas de resolver una baja visibilidad, como el uso correcto de las luces antiniebla», subrayó Jaime.
El uso del celular al volante también fue un tema abordado. «La distracción por el celular es un problema distinto al olvido de señalizar una maniobra, pero su impacto es mucho más grave», explicó Jaime. «La atención se dispersa, y eso reduce las oportunidades de comunicación visual en la vía».
Este análisis invita a reflexionar sobre cómo pequeñas acciones en el tránsito, que parecen triviales, pueden tener consecuencias significativas.