En conferencia de prensa, representantes de la Sociedad Rural de Bragado manifestaron su rechazo a las políticas fiscales propuestas en el presupuesto municipal 2025, señalando aumentos desmedidos en tasas e impuestos que afectan al sector agropecuario.
Durante el encuentro, los dirigentes cuestionaron la falta de diálogo con el Ejecutivo municipal y el Concejo Deliberante. Según informaron, a pesar de los intentos iniciales de concertar reuniones, estas se interrumpieron sin avances concretos. Además, el Concejo Deliberante solicitó documentación exhaustiva de la institución, lo que generó tensiones en las relaciones.
Aumentos «desmedidos» y su impacto en el agro
Uno de los puntos más críticos fue el análisis del presupuesto 2025, que contempla un incremento significativo en la tasa vial. Según Félix Pisin, encargado del análisis presupuestario, la tasa experimentó un aumento del 256% durante 2024, y el proyecto del Ejecutivo propone otro incremento que duplicaría los costos actuales.
«Nuestros productos no han evolucionado en precio, y hay incluso perspectivas de baja. Este aumento en las tasas es desproporcionado frente a la realidad económica del sector», señaló Pisin.
Además, los representantes denunciaron que en 2024 el impuesto inmobiliario rural subió un 750%, mientras que el complementario alcanzó un aumento del 3,250%. Estas cifras, aseguraron, son insostenibles para un sector que viene de años de sequías, tornados y vientos que afectaron severamente la producción.
Disparidades en la red vial
Carlos Gutiérrez, otro de los voceros, destacó que, aunque hubo mejoras en ciertos sectores de los caminos rurales, varias áreas permanecen desatendidas. «Hay cuarteles como Warnes, Irala y el 11 que están olvidados, mientras que otros muestran avances. Además, el parque de maquinarias sigue siendo obsoleto y no hay planes de renovación en el presupuesto», explicó.
Según los datos presentados, el presupuesto estima ingresos de 1,800 millones de pesos y gastos de 1,060 millones, dejando 800 millones sin un destino claro para la red vial. «Ese dinero que aporta el campo debería estar destinado a mejorar los caminos, pero parece ser desviado a otros sectores», cuestionaron.
Progresividad en las tasas: un cambio polémico
Por primera vez, el presupuesto introduce un esquema de progresividad en las tasas viales, aplicando aumentos del 5% al 20% según la cantidad de hectáreas del propietario. Desde la Sociedad Rural rechazaron esta medida, argumentando que no refleja el uso real de los caminos rurales y que castiga injustamente a los productores más grandes.
Propuestas para un cambio
Como solución, la institución abogó por priorizar la mejora de la recaudación y redistribuir recursos antes de aprobar aumentos indiscriminados. «Queremos que los contribuyentes y las autoridades sepan que estos incrementos no solo son injustos, sino inviables para un sector que ya enfrenta múltiples adversidades», concluyeron.
La Sociedad Rural instó a los concejales, mayores contribuyentes y al Ejecutivo a reconsiderar estas medidas y buscar alternativas que sean justas para todos los sectores involucrados.
