Giselle Camús es licenciada en obstetricia. Presta servicios en la sala del barrio El Bajo y en El Hospital Materno Infantil “Ramón Sardá, ubicado en Capital Federal.

Como profesional de la salud, la exposición al coronavirus es grande y los cambios para prevenir dolores de cabeza son unos cuantos. De eso habló hoy, cuando recibió el llamado de Mañanas en orsai (9 a 12, por la 91.5).

«Esto nos ha modificado y mucho la vida», dijo antes que nada, con la mente en su trabajo, familia y relaciones sociales.

En la ciudad de Buenos Aires, el número de profesionales que tiene ese centro de salud supera los 1000, sin infectados.  «Estamos muy protegidos, por surte», agregó.

Enseguida, remarcó que «se trabajó muy a tiempo» para que el riesgo sea el mínimo posible. En ese marco, añadió que fue fundamental la información para formular protocolos, modificaciones permanentes e insumos apropiados.

Las embarazadas son un grupo de riesgo. Por tal motivo, aclaró que en el nosocomio porteño los cuidados son extremos. Tampoco se olvidó de que el acompañamiento y contención resultan fundamentales para quienes están por dar a luz.

En Capital Federal pasa varias horas y ese lugar se convirtió en parte de su vida.»Estoy orgullosa de donde trabajo», manifestó.

Al momento de hablar sobre Bragado, indicó: «Hay hasta un protocolo para entrar a casa». Eso lo reforzó con el «buen equipo de trabajo» que deja el alma en El Bajo.

«Es nuestra profesión, es lo que elegimos, y tenemos que estar hoy y siempre», redondeó.

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