En la madrugada del domingo, personal del Área de Tránsito y Guardia Urbana, con el apoyo de la policía local, realizó 41 controles de alcoholemia en diferentes puntos de la ciudad y sus accesos, resultando en cuatro casos positivos.
En la madrugada del domingo, un operativo conjunto llevado a cabo por el Área de Tránsito y Guardia Urbana de la Dirección General, junto con personal policial, resultó en la realización de 41 tests de alcoholemia a conductores que circulaban tanto por la ciudad como por sus accesos. Este control riguroso tenía como objetivo principal garantizar la seguridad vial y prevenir accidentes.
Durante el operativo, se estableció que cuatro de los conductores examinados presentaron resultados positivos en los tests de alcoholemia. Los agentes procedieron de inmediato a labrar las actas correspondientes, contando con la intervención del Juzgado de Faltas local para el seguimiento y sanción de estos casos.
El Área de Tránsito y Guardia Urbana destacó la importancia de estos controles como medida preventiva y de concientización. «Es fundamental que los conductores comprendan la responsabilidad que conlleva manejar un vehículo, especialmente en relación con el consumo de alcohol», subrayó un portavoz de la Dirección General.
El operativo no solo se centró en la detección de alcoholemia, sino que también sirvió para reforzar la presencia policial y de tránsito en las calles, lo que contribuye a un mayor respeto por las normas viales y a la seguridad de todos los ciudadanos. Los conductores que dieron positivo enfrentan sanciones que pueden incluir multas significativas y la suspensión de sus licencias de conducir.
Este operativo es parte de una serie de acciones planificadas para el año, enfocadas en la reducción de accidentes de tránsito y en la promoción de conductas responsables al volante.