La segunda edición de la «Fiesta del Algodón Ecológico más Austral del Mundo» dejó un marcado éxito y atrajo a un público entusiasta interesado en descubrir las posibilidades de la siembra y producción de este producto en la región. El evento, que tuvo lugar en el Centro de Investigación y Difusión del Algodón Ecológico Bonaerense, en el predio La Pirula Font, se presentó como una oportunidad única para explorar la producción rural y sus derivados.

La «Fiesta del Algodón Ecológico más Austral del Mundo» celebró su segunda edición con un rotundo éxito que capturó la atención de un público diverso y ávido de conocer más sobre las posibilidades que este cultivo ofrece para la región. El evento tuvo lugar en el Centro de Investigación y Difusión del Algodón Ecológico Bonaerense, en el predio La Pirula Font, ubicado en el kilómetro 219,5 de la Ruta Nacional N°5.

Desde las 10:00 de la mañana, el lugar se llenó de entusiastas interesados en explorar las posibilidades de la siembra y producción de algodón ecológico en la región. La fiesta se presentó como una propuesta innovadora, centrada en promover no solo la siembra de algodón, sino también todos los subproductos que pueden generarse a partir de este cultivo.

El evento atrajo a un público diverso, incluyendo a ingenieros agrónomos de la Facultad de Agronomía de la UBA, así como la visita destacada de Juan Carlos Blumberg, quien contribuyó a la confección del hilo de algodón ecológico. La propuesta de la fiesta incluyó entrada y estacionamiento libre y gratuito, además de un servicio de buffet ofrecido por la cooperadora de la Escuela Normal.

La jornada, que arrancó a la mañana, tomó impulso al mediodía con el izamiento del pabellón nacional. Luego, los asistentes fueron invitados a cosechar a mano el algodón, que luego pasó por una demotadora para separar la fibra de la semilla. Entre los atractivos del evento se encontraba la artesana Rosario de Mercedes, quien hilaba la fibra obtenida para confeccionar prendas, mostrando una forma tradicional y artesanal de trabajar con el material.

El evento también contó con la venta de prendas de algodón ecológico y la distribución de semillas para fomentar la siembra en los hogares. Además, se presentaron diversos subproductos derivados de la siembra del algodón, como macetas, botones y briquetas fabricadas a partir de restos de algodón. Asimismo, Aníbal Molina experimentaba con la producción de aceite de algodón.

La jornada también ofreció un espectáculo que se fusionaba con el evento en sí. Emanuel Gaboto, acompañado por su madre y dos jóvenes payadoras de 25 de Mayo, presentaron rimas tradicionalistas dedicadas al noble cultivo del algodón. Durante su actuación, presentaron una canción alusiva y creada especialmente para el evento.

Aníbal Molina, organizador del evento, expresó su satisfacción por la respuesta del público: «La fiesta se viene desarrollando muy bien, mucha gente interesada, ha venido gente de muchas localidades. Así que muy contento y conforme». Juan Carlos Blumberg compartió el entusiasmo y resaltó la importancia de la producción del algodón y sus derivados para el crecimiento del país.

Con vistas al futuro, se anticipa la posibilidad de reiterar la fiesta en febrero, durante el florecimiento del algodón, y en abril, cuando se comienza a formar el capullo. Molina destacó la perseverancia y el compromiso con la difusión de una nueva economía basada en la producción de algodón ecológico, que involucra a diferentes actores en la cadena productiva y promueve la colaboración y el crecimiento de Argentina.

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