En el marco de la creciente demanda de atención en salud mental, la coordinadora de salud mental Lucía González visitó MAÑANAS EN ORSAI. Destacó los esfuerzos realizados en la integración y ampliación de servicios en su comunidad. Durante una entrevista, compartió los desafíos, avances y reflexiones sobre un tema que atraviesa diversas problemáticas sociales.
Un proyecto para integrar profesionales
“En la primera mesa de salud mental, realizada en marzo, surgió la preocupación por la alta demanda. Había entre 12 y 13 profesionales trabajando por separado, y por eso presenté un proyecto para integrarlos. Mis compañeras coincidieron en que yo lo llevara adelante”, explicó González. Este esfuerzo busca articular recursos para responder de manera más efectiva a las necesidades de la población.
Atención inmediata, una prioridad
González subrayó que la atención oportuna es fundamental. “Cuando una persona se siente en el abismo, la atención debe ser inmediata, no en cinco meses”, afirmó, destacando la importancia de evitar tiempos de espera prolongados.
La ampliación del servicio de “primera escucha” ha sido clave en este contexto. “Estamos intentando aumentar la atención para que no todo sea derivado a la medicalización”, añadió, enfatizando la necesidad de diversificar las estrategias de abordaje.
Desafíos contemporáneos y su impacto en la salud mental
González también vinculó problemáticas actuales, como la ludopatía, con cambios sociales y tecnológicos. “La ludopatía actual es un efecto de la digitalización de la vida y de la desvalorización del trabajo. El trabajo es un ordenador de la vida, pero no cuando estás en condición de explotación”, reflexionó.
En este sentido, planteó una mirada crítica sobre el sistema económico: “El problema no es que vivimos en el capitalismo, sino que somos el capitalismo. Construir políticas de salud mental ahora implica entender que no todo es monetizable, sino que se hace porque uno ama su trabajo”.
Avances desde la gestión municipal
González destacó los aportes de la gestión municipal en la optimización de los recursos ya existentes. “Se sumaron horas y profesionales en las localidades. En una época donde todo es instantáneo, vamos por la proyección, la evaluación, planificar y ordenar el caos, ser amorosos, hacer planes con otros y elaborar comunidad”, indicó.
Finalmente, subrayó la relevancia de la presencia estatal: “Es importante que la gente pueda pensar que la presencia pública de profesionales es el Estado presente, que salva vidas”.
Estos esfuerzos reflejan un cambio de paradigma en la atención de la salud mental, apostando por un abordaje integral, comunitario y comprometido con las necesidades de las personas en un contexto de incertidumbre y transformación social.
