La situación de precariedad que atraviesan los jubilados municipales ha llegado a un punto crítico, llevando a un grupo de ellos a solicitar una audiencia con el Intendente Barenghi para exponer sus duras realidades y buscar soluciones concretas.
En medio de la expectativa por las próximas negociaciones paritarias entre el gobierno local y los gremios municipales, los jubilados municipales se encuentran en una situación particularmente difícil, enfrentando jubilaciones consideradas entre las más bajas. Un grupo representativo de jubilados ha iniciado una serie de reclamos, buscando visibilizar su situación y lograr mejoras significativas.
Hebe Obligado, una jubilada municipal, informó que un grupo significativo de jubilados, cercano a los 100 integrantes, ha estado manifestando su inquietud a través de un grupo de WhatsApp. Destacó que la situación viene siendo preocupante desde hace mucho tiempo y que recientemente se reunieron con el Ejecutivo Municipal para expresar sus demandas.
Recordó que la última paritaria que contempló aumentos para los jubilados municipales fue en noviembre, y desde entonces no han recibido bonos ni aumentos. La falta de bonificaciones se debe a que el Instituto de Previsión Social (IPS) al que están vinculados no otorga bonos, a diferencia de ANSES.
La entrega de bonos de $30,000 y $60,000 a los empleados municipales encendió alarmas entre los jubilados, ya que no reciben este beneficio. Además, a nivel provincial, la falta de una organización que agrupe a los trabajadores municipales jubilados complica la situación, ya que el IPS abarca a distintos sectores sin una respuesta unificada.
Hebe Obligado relató que fueron recibidos por el Intendente Barenghi la semana pasada, donde plantearon la necesidad de que las paritarias, que generalmente se abren en marzo, se adelanten debido a la situación económica del país. También solicitaron que el decreto del aumento se envíe automáticamente al IPS para evitar demoras en la percepción de los beneficios.
La jubilada expresó su preocupación por la falta de aumentos desde noviembre, dejando a los jubilados municipales sin incremento durante seis meses, sumado a la ausencia de bonos. Ante sueldos que pueden rondar los $79,000 y $50,000, la realidad se torna complicada para aquellos que dependen exclusivamente de estas jubilaciones.
Obligado también abordó la situación de la cobertura médica para los jubilados municipales, indicando que, aunque la atención en el hospital esté cubierta, los aumentos en el costo de los medicamentos y la falta de cobertura total generan dificultades adicionales.
Finalmente, instó a los jubilados a tener paciencia y unirse en la defensa de sus derechos. Además, resaltó la importancia de que los aumentos se reflejen en el básico y que bonificaciones con aportes se hagan efectivas para mejorar la situación económica de quienes han dedicado años de servicio al municipio.
